~Paño De Lágrimas~

Qué joder de vida. Desde pequeña he tenido la mala maña de ser paño de lágrimas de las personas. Siempre he sabido escuchar, hablar si es necesario, interceder, o simplemente callar. Siempre he sabido meterme bien hondo en los zapatos de la persona que me llama su "confidente" y siempre he sabido dejarlo ahí, en mi memoria, no compartirlo con nadie, ni en forma de chisme ni en modo de desahogo... ni en chantaje.

No sé por qué, inconcientemente o no, me he ganado este título. No soy la persona más invitante. Please! Si yo conociera una persona justo como yo, me caería pésimamente! A nadie le agrada una "que se cree la víctima y se apega a sus problemas físicos para echarse abajo" y nadie quiere saber de alguien que "usa sus emociones para manipular la mente de las personas". Al menos... eso se ha dicho de mí. Confieso que me ha halagado ser la confidente de muchas personas, en serio... no es eso lo que me molesta, siempre tengo el tiempo para escuchar, y me encanta saber que hay personas que confían en alguien que también es humano y también comete errores...

Lo que me molesta... es lo que pasa después.

El lío es que cuando esa persona, que viene a mí cargad@ de problemas, al fín logra desahorgarse y pone a un lado sus problemas para concentrarse en las soluciones, las cosas cambian. Ya no es la misma necesidad de encontrarme en el Messenger, o preocuparse porque no tomo el teléfono. Ya lo que quería decir está dicho, y lo demás no importa. Ya yo cumplí con mi deber, entonces paso a un segundo plano. Ya Yani no es importante.

Me produce un vacío en el alma que aparezcan cuarenta para que yo escuche sus problemas, y sólo lleguen cuatro a decirme lo que decidieron, y lo bien que siempre al final les va. No es justo que me pele las pestañas a las tres de la madrugada entregándome a tus sollozos, cuando sé que a las tres de la tarde del otro día, ya te olvidarás de mí.

Qué tal recordar tu paño de lágrimas y desesperación, pensar que lo dejas empapado de tu dolor, y allí depositas tantos sentimientos, que no eres capaz de afrontar tú sol@?

Qué tal lavar tu maldito paño de lágrimas, así la próxima vez que lo necesites, lo encontrarás limpio y listo para secarlas otra vez???

Aquí estoy, siempre dispuesta a escucharte de nuevo. Pero no te sorprendas si al recojerme y limpiarte las lágrimas te encuentres en cambio con un papel de lija.